El Llagostera regresa a los Campos de Sport para disputar la Copa del Rey ante el Racing
Vuelve la Copa del Rey a los Campos de Sport de El Sardinero y la afición racinguista tiene muchas ganas de volver a disfrutar de esta competición, tradicionalmente esquiva para el club santanderino.
Ni el aviso de galerna para esta noche quita las ganas al racinguismo. "la Copa es muchísima responsabilidad y también la vemos como una oportunidad. También puede ser una inyección económica para el club. Si superamos dos rondas recibiríamos en casa a un rival que esté disputando competición europea... Primero hay que pasar este partido, es un partido oficial en nuestro templo y aquí no hay ni amistosos. Tenemos que demostrar que somos un buen equipo a nivel colectivo e individual", asegura Ángel Viadero.
El partido es especialmente emotivo por dos motivos. El rival es el Llagostera, el equipo ante el que se consiguió el último ascenso a Segunda División en el mismo escenario. Y en segundo lugar no ha vuelto a haber en El Sardinero un partido copero desde el famoso plante de honor ante la Real Sociedad. Fue el 30 de enero de 2014 y en la plantilla ya solamente queda un futbolista que vivió todo aquello: Borja Granero.
Aunque en la época moderna esta competición ha traído más alegrías que penurias, con dos semifinales disputadas, lo cierto es que la Copa del Rey siempre fue una maldición para los cántabros. La temporada pasada por primera vez en la historia del club otro equipo de Cantabria dejó fuera a los santanderinos en la competición del KO. Ganar esta noche será un primer paso para olvidar la debacle de Laredo de la campaña anterior. "Esperemos que el equipo esté a la altura", indica el entrenador santanderino, que no quiere minusvalorar la Copa. Eso sí, el técnico debe pensar que tiene un calendario complicado en este arranque liguero, que el domingo debe jugar en Ferrol ante otro gallito del Grupo I y que tiene a varios jugadores con molestias. "Intentaré poner el mejor once posible y aunque hagamos pequeños retoques el equipo compite bien. Vamos a hacer un once para pasar la eliminatoria. Si no pasamos no será porque hayan sido mucho mejores que nosotros. No vamos a tirar la Copa, ni haremos rotaciones... Las intenciones, más claras imposibles, pasar". afirma Viadero.
Esta mañana habrá una pequeña sesión de entrenamiento en La Alberica para comprobar el estado de varios jugadores con molestias: Granero, Aquino, Julen Castañeda, Córcoles y Samuel Llorca. Es preocupante lo de Julen Castañeda, el único que no tiene relevo natural, aunque no el lateral vasco no tiene nada grave. El entrenador no ha querido dar demasiadas pistas sobre un posible once titular. Parece probable que debute el portero Raúl Domínguez. También que Dani Aquino, con molestias desde el último amistoso, tenga un merecido descanso... Eso abriría la puerta del once al onubense Caye Quintana. Álvaro Peña, después de haberse perdido por sanción el último partido de liga, podría volver al equipo titular. El resto de once es un misterio, pero seguro que más de un canterano tendrá su oportunidad de inicio. La convocatoria solamente es de 16 futbolistas por lo que se complican la tarea del míster.
El rival estuvo entrenando ayer en La Caseta, el campo del SD Noja. El Llagostera no ha comenzado con muy bien pie la temporada después de perder la categoría de plata. Ha sumado cuatro puntos de los 9 posibles y está todavía en periodo de adaptación a 2ªB con una plantilla bastante nueva. El central cántabro Samuel San José, después de su aventura en la segunda categoría de México, ha regresado al fútbol español e incluso podría tener minutos esta noche en Santander, También destaca el fichaje de Colorado, que militó la campaña anterior en el Reus. Al frente del club catalán sigue Oriol Alsina, el alma mater del Llagostera. El técnico catalán no ha venido con todos los efectivos. En Cataluña se ha dejado al goleador de la pasada jornada, Marc Fernández, que le hizo dos tantos al Atlético Saguntino y trae a tres futbolistas del filial. Los dos equipos reservarán a sus mejores hombres, aunque nadie dice querer tirar la Copa.
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