Triunfo deslucido del Racing en un derbi cántabro en el que la defensa de la Gimnástica aguantó el tipo
A la fiesta del fútbol cántabro le faltó el fútbol. Eso sí,
el derbi tuvo un ambientazo, tensión, rivalidad, polémica… Todos los alicientes
de un Racing-Gimnástica.
Al líder del Grupo II le faltó su habitual fluidez ante un rival rocoso. Lo importante es que el equipo de Iván Ania sumó los tres puntos y amplía su ventaja como primero. Fue gracias a un gol conseguido en un barullo y con los gimnásticos reclamando mano. Muy dudosa. Más claro fue un penalti que no se señaló por un derribo de Dani Segovia en boca de gol. El portero visitante, Álex, tuvo varias intervenciones de mérito y el Racing fue el que estuvo siempre más cerca del triunfo.
Al líder del Grupo II le faltó su habitual fluidez ante un rival rocoso. Lo importante es que el equipo de Iván Ania sumó los tres puntos y amplía su ventaja como primero. Fue gracias a un gol conseguido en un barullo y con los gimnásticos reclamando mano. Muy dudosa. Más claro fue un penalti que no se señaló por un derribo de Dani Segovia en boca de gol. El portero visitante, Álex, tuvo varias intervenciones de mérito y el Racing fue el que estuvo siempre más cerca del triunfo.
Sufrió el conjunto santanderino más de lo previsto en la primera mitad ante
una Gimnástica que utilizó sus armas… Defensa numantina, pérdidas de tiempo,
faltas muy duras y otras artimañas. Es el fútbol del modesto ante el grande.
Los de Pablo Lago lograron botar varios saques de esquina en
estos primeros 45 minutos y para ellos era la única manera de acercarse a los
dominios de Iván Crespo. Uno de ellos lo remató Fermín, pero el balón tocó en
un racinguista y se perdió por la línea de fondo. En el segundo córner, botado como
todos por Camus, el Racing salió muy bien a la contra. El último pase de Sergio
pilló a contrapié a Dani Segovia.
Se animó el choque y en un centro de falta de Enzo Lombardo
el esférico terminó estrellándose en el palo después de que el portero
visitante, Álex no viese a tiempo el balón.
Camus colgó un buen balón en un saque de esquina y lo remató
dentro del área Cristian Moreno en el minuto 21. El duelo estaba igualado,
aunque cada contrincante tuviese estilo.
En el minuto 25 Cagigas, el mejor de los jugadores de campo
de la Gimnástica, se fue hasta la frontal y logró disparar a puerta, aunque
flojo y raso. Atrapó la pelota Iván Crespo sin mayores contratiempos. El Racing
se espabiló con ese acercamiento gimnástico y achuchó a una Gimnástica que se
defendía como gato panza arriba.
Los torrelaveguenses, algo marrulleros, generaron una
tángana que pudo haber roto el encuentro. Fer se quedó tumbado en el césped y
el Racing continúo jugando… Algo que hace siempre. La propia Gimnástica no
había enviado el balón fuera. Varios futbolistas fueron a recriminárselo a los
racinguistas y se montó un lío tremendo. Camus se quejaba de un golpe y Cejudo tuvo
que irse a la banda para limpiarse la sangre con la ceja rota. La ceja de
Cejudo. Ambos vieron amarilla en un juicio rápido de Salomón.
Y en el minuto 36 toda esa tensión estalló con el único gol
del partido. Una acción confusa, en un saque de esquina, en la que parece que
Óscar Gil toca con la mano, pero analizando repeticiones se aprecia que es Víctor el que podría haber anotado un gol en propia meta. Muy confuso y dudoso. Puede ser gol válido, pese a que Pablo Lago se mostró tajante. También Cagigas contó al acabar el partido que Figueras le había dicho que había sido gol con la mano... El catalán asegura que no ha dicho nada y que ni siquiera charló con el jugador de la Gimnástica. El acta arbitral otorga el tanto a Gil.
La primera parte concluyó con una mala salida de Álex con el
pie y Enzo Lombardo, muy escorado, mandando el
balón al lateral de la red con la portería sin guardameta.
Siguió muy espeso el Racing en la segunda mitad. La
Gimnástica tapaba todos los espacios, pero no era capaz de llegar con claridad
a la meta rival.
En el minuto 54, ¡en una contra del Racing!, Dani Segovia
fue derribado en el área gimnástica. Penalti claro que no pitó el árbitro
vasco. Poco después el único centro del partido de Buñuel estuvo a punto de ser
cazado dentro del área por el delantero madrileño. Los laterales del equipo
local tuvieron escaso protagonismo ofensivo.
En el 69 un tímido disparo de Enzo termino en las manos de
Álex. La Gimnástica, con ese 1-0, soñaba con un empate en alguna acción
aislada, pero no inquietaba la portería racinguista. En el 73 el
hispano-francés Álex Ruiz salvó el segundo tanto tras un buen remate de
Segovia. Y de nuevo el meta galo fue clave para evitar el gol racinguista tras
un disparo de Sergio Ruiz.
Un disparo de Álvaro Cejudo y otro de Cayarga, de falta
directa, hicieron de nuevo intervenir a Álex Ruiz con acierto. Sin hacer un
buen partido –mérito del orden defensivo de la escuadra de Pablo Lago– el
Racing hizo mucho más por ganar que la Gimnástica y mereció sumar el triunfo,
aunque fuese ajustado.
RACING,
1: Iván Crespo, Aitor Buñuel, Julen, Óscar Gil, Jordi Figueras,
Sergio Ruiz, Nico Hidalgo (Cayarga, 71), Rafa de Vicente (Quique Rivero, 80),
Dani Segovia (Jon Ander, 84), Cejudo y Enzo.
GIMNÁSTICA,
0: Álex Ruiz, Fer, Bardanca, Camus, Cristian, Luis Alberto,
Primo (Nacho Rodríguez, 65), Palazuelos, Cagigas (Barbero, 79), Víctor (Rozas,
61) y Fermín.
Gol: 1-0, minuto 38, Óscar Gil.
Árbitro:
Ibai Rezola Etxeberría (Comité vasco). Mostró tarjetas
amarillas a Cejudo y Sergio Ruiz, por parte local, y a Cagigas, Víctor, Camus y
Luis Alberto, por parte visitante.
Incidencias:
15.813 espectadores. Un tifo de La Gradona espectacular. Los
dos equipos posaron con una pancarta sobre el 'Día Internacional contra la
Violencia de Género'. En el descanso niños del Racing y de la Gimnástica
jugaron juntos en el césped.
Grandisima idea la de que saliesen los niños de los dos equipos en el descanso a jugar
ResponderEliminarEl tifo espectacular si. Sobretodo acordándose de una peña de la Gimnástica poniendo sus iniciales en una lápida... hay que decirlo todo
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