Llegó al Atlético Baleares en 2014 y es más de grada que de palco, cumple con el tópico de presidente millonario excéntrico del fútbol
Es el
alemán de la pasta: Ingo Volckmann. El Atlético Baleares pivota sobre este
empresario germano desde que llegó al club en 2014 y rescató a la entidad de la
quiebra.
Tiene su
punto excéntrico, un tópico de los millonarios que se acercan al fútbol. Es
abonado del Hertha de Berlín y muy futbolero. Un hincha pasional. Prefiere más
la grada que los palcos. No hay más que ver como celebró en el césped su mayor
éxito hasta la fecha en el mundo del fútbol: la Copa Federación que logró en
2016 derrotando en la final al Rayo Majadahonda. Los directivos del club
madrileño todavía recuerdan que ni les saludó y que les ubicó en una grada al
sol. Volckmann también ignoró al presidente de la Federación Española, entonces
Ángel María Villar. Va a su aire y no tiene miramientos.
El club
blanquiazul se convirtió en Sociedad Anónima Deportiva en 2012 y Volckmann se
hizo con el 100% de las acciones dos años después y en una situación complicada.
Le costó lo suyo hacerse con la entidad pese a llegar como salvador y dispuesto
a vaciar su cartera. “No es fácil asumir a un alemán en un club de Mallorca”,
llegó a decir. Al principio todos eran muy recelosos sobre sus intenciones, pero
ahora la afición está encantada con su labor. Tuvo que poner unos 700.000 euros
iniciales.
No hay mucha documentación sobre el origen de la fortuna del empresario.
Alguna referencia a hoteles y bienes inmobiliarios. Poco más y nada claro.
La temporada pasada Ingo Volckmann inyectó 8,1 millones de euros para compensar las
pérdidas de ejercicios anteriores y terminar de pagar el nuevo estadio, que ha
costado unos tres millones de los que se han abonado ya dos. La remodelación ha
estado plagada de problemas de financiación, construcción por daños en la
estructura y diferentes trabas legales. El Ayuntamiento aportará una cifra cercana al medio millón de euros para pagar
el nuevo césped natural y la iluminación del recinto… Ocurra lo que ocurra en el
terreno de juego el Atlético Baleares estrenará estadio la próxima temporada y
su presidente no parecen achicarse con nada.
El domingo
Ingo Volckmann puede dar la campanada y devolver al Atlético Baleares al fútbol
profesional 56 años después y con el Estadio Balear listo para estrenarse en
agosto. Está a unos 100 metros de Son Malferti y tiene capacidad para 6.800
espectadores. Su plan de negocio parece marchar viento en popa si no lo impide
el Racing.
Cuando el
Atlético Baleares militó en Segunda Volckmann no había nacido, tiene 51 años,
pero está muy en forma. Es un armario ropero con una pinta imponente de
guardaespaldas y ni un pelo en su cabeza.
Su mano
derecha en el club es todo lo contrario. Muy delgadito y con aspecto inocente, el
joven director deportivo Patrick Messow es un treintañero berlinés que gestiona
el día a día con conexiones en el fútbol holandés y alemán… Aunque el Atlético
Baleares casi siempre han apostado más por fichar “producto” local.
Volckmann contrató
al alemán Christian Ziege
para el banquillo a mitad de la 2015/2016, pero no funcionó la “germanización”
y lo destituyó casi al final de la siguiente campaña. Josico dirigió al equipo
los nueve últimos partidos de la fase regular y los cuatro siguientes del play-off. Su idea era implantar la
manera alemana de hacer las cosas en España… Pero en Segunda B parece que le ha
funcionado mejor un veterano como Mandiola que un exinternacional de renombre
sin experiencia en la categoría. Con el técnico de Eibar ha dejado de llegar jugadores
de Alemania u Holanda. Otras campañas tampoco habían terminado de funcionar…
Una de las ideas del proyecto era atraer a esos futbolistas de calidad en la
recta final de sus carreras que quisieran “jubilarse” en Mallorca o que ya
veranearan en la isla. Marcel Simon Ndjeng Biyouha, seis temporadas en la
Bundesliga, jugó poco en Segunda B. A Deniz Fathi le fue mejor, pero se retiró
el pasado verano. Ambos habían jugado en el Hertha, el club favorito del dueño.
Este será
el segundo play-off para Volckmann. En la campaña 2016/2017 el Albacete les
eliminó en la segunda ronda de la fase de ascenso a Segunda A tras haber apeado
al Toledo. Trras el fracaso de la campaña pasada en la que el club se salvó en
la última jornada vuelven ahora a tener al Atlético Baleares cerca de su
objetivo… Llegar a la LFP. Ese era su objetivo cuando tomó las riendas de la
entidad en 2014. Si el domingo logra el ascenso no duden en que saltará al
césped y será muy protagonista.
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