Días de vino y rosas

Opinión de Antonio Sainz Cueto, presidente de la Asociación Unificada de Pequeños Accionistas

Hace un par de semanas, en la Gala de AUPA, la Asociación Unificada de Pequeños Accionistas del Racing, se comentó que la fiesta grande estaba por llegar. Afirmación profética ya que ayer llegó la fiesta más esperada por el racinguismo desde hace cuatro interminables años, y las celebraciones sólo acaban de comenzar.

Torrentes, ríos enteros de alegrías más que merecidas por una afición que estaba pagando cruelmente culpas ajenas. Ver ayer a unas decenas de racinguistas en Son Malferit, con las enormes dificultades que tuvieron que salvar, con un resultado de ida no ventajoso, soportando el calor en unas instalaciones precarias y la seguridad de un partido nada vistoso, bronco ya era para hacerles una estatua. Me paseé por la mañana dominical, las calles estaban salpicadas de camisetas blanquiverdes. La ciudad respiraba racinguismo. Había esperanza, pero también tensión. Fueron dos horas interminables. Miedo con el gol de ellos, el del empate se oyó en todo Cantabria.

Y luego minutos que parecieron días, meses y por fin el estallido de una alegría esperada años. Lágrimas, abrazos, cánticos, manteos. No se sabía quienes eran los jugadores, quienes los aficionados, cuerpo técnico, director deportivo, máximos accionistas... Todo era una piña en verde.

Hasta los que no habíamos viajado nos unimos en ese abrazo con ellos. Luego los teléfonos echando humo. Mensajes de felicitación, fotos, emoticonos, conversaciones de palabras entrecortadas por la emoción. Y una cita: A las doce en el Ayuntamiento. Que largo se hizo el día a la espera de la llegada de los héroes: Los del campo y los de la grada.

Enhorabuena racinguistas, os lo merecéis sobradamente. Demasiado castigo habéis soportado para un pecado que no habéis cometido. Lo han hecho unos seres avariciosos, a los que les importaba un bledo el dolor ajeno si con eso llenaban sus bolsillos. Todos esperamos que tengamos otra fiesta cuando purguen sus culpas. Pero ahora no es momento más que para ser felices, para que la fiesta dure y dure, porque nos lo tenemos ganado.

Gracias a todos los racinguistas, habéis demostrado sobradamente la gran afición que sois, lleváis años dando muchísimo a cambio de casi nada.

Pero no debo finalizar este escrito sin resaltar que estos días de vino y rosas habrían sido imposibles sin el compromiso de unos señores que llegaron al club como el maná, con una arriesgada inversión multimillonaria han hecho posible el lema de “Este año sí”. Sin ellos no es que no estaríamos de fiesta, es que, hace años habríamos estado en el funeral de nuestro querido Racing. Yo, como racinguista de muchos años les estaré eternamente agradecido y ¡¡ojalá!!, se queden muchos años con

nosotros.

¡¡¡ AUPA RACING!!!

Antonio Sainz Cueto

Presidente de AUPA