El jugador francés reconoce que el Racing-Deportivo será "determinante" para la moral del equipo
Ha
marcado cinco goles en once partidos, más que en ninguna otra temporada a lo
largo de su carrera. Karim Yoda deslumbra en LaLiga SmartBank tanto como cuando
llegó al Getafe en Primera siendo un desconocido hace ya cinco campañas.
Había jugado en el fútbol suizo y rumano lejos de los focos antes de recalar en Madrid. Las lesiones terminaron por frenar su crecimiento en España, pero con 30 años ha recuperado su mejor versión en el Racing. “Intento ayudar al equipo de la mejor manera que puedo. Me siento cómodo y muy bien. El míster me dio confianza y los compañeros me ayudaron mucho y ojalá siga así”, explicaba.
Había jugado en el fútbol suizo y rumano lejos de los focos antes de recalar en Madrid. Las lesiones terminaron por frenar su crecimiento en España, pero con 30 años ha recuperado su mejor versión en el Racing. “Intento ayudar al equipo de la mejor manera que puedo. Me siento cómodo y muy bien. El míster me dio confianza y los compañeros me ayudaron mucho y ojalá siga así”, explicaba.
Yoda,
que ha dado dos asistencias de gol además de los cinco tantos, también
reconocía sus lagunas defensivas: “Tengo que hacer un poquito más en la parte
defensiva. Jugamos muy atrás los últimos partidos y para luego ir adelante
cuesta un poco, el míster nos pidió jugar más adelantados para tener más fuerza
arriba. En la parte ofensiva el míster me da libertad total para ir por la
derecha, por la izquierda o por el centro y me siento bien”.
Sobre
el partido del domingo a la seis ante el Deportivo de La Coruña en El Sardinero,
penúltimo contra colista, comienza a tejerse mucha tensión y nervios. El
encuentro ha sido declarado de alto riesgo y lo será en la grada y en el
césped. El entrenador racinguista, Iván Ania, ha dicho en el vestuario que no
se trata de ninguna final para tratar de no atenazar a sus futbolistas. “Estamos
en nuestra casa, tenemos que estar fuertes delante de nuestra gente y vamos a
hacer todo para ganar este partido porque es muy importante. Iván Ania nos ha
dicho que no es una final, es verdad que queda mucha liga pero es muy importante
porque nos puede ayudar mentalmente para tener más confianza para el resto de
la campaña. Puede ser determinante”, revelaba Yoda.
Con
un solo triunfo en doce jornadas el Racing comienza a angustiarse. “Cada
partido jugamos para ganar, es mejor sumar de tres en tres, pero de momento nos
falta contundencia en los partidos. Estamos en el buen camino. Nos falta una
victoria”, indicaba el francés. Con tanta tensión el equipo apenas celebra los
goles, algo que llama demasiado la tensión. “Es verdad que no estaba contento
con lo que estábamos haciendo, estaba contento de marcar, pero un poco
nervioso. Al final, cuando estemos más alto en la tabla quizá lo celebraré más”,
trata de explicar Yoda.
Entre la barrera idiomática y las pobres explicaciones
no queda demasiado claro qué ocurre para que se realicen celebraciones tan
lacónicas de los goles sobre todo después de levantar un 3-1. Al respecto del empate
en Tenerife, Yoda relató que habían dado un paso al frente tras el descanso: “En
la primera parte no hicimos lo que pidió Ania, dos líneas compactas pero no tan
atrás. Hemos sufrido mucho. La segunda parte fue mejor y adelantamos líneas y
sacamos ese punto, que nos vendrá bien. El tema táctico depende del míster,
nosotros tenemos que adaptarnos a los que nos pide. El 4-4-2 nos va bien, pero
si estamos muy atrás nos cuesta un poco. Al descanso el míster nos pidió ir adelante
para ganar el partido y el gol de Enzo nos ayudó mucho para seguir con opciones”.
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