Llegó al Racing cedido por el Real Madrid en el mercado de invierno de la temporada 96/97
Fue un ilusionante fichaje de invierno que no tardó en
dejar helado al racinguismo en la temporada 96/97. Dejan Rambo Petkovic pasó sin pena ni gloria por Santander antes de
triunfar en Brasil.
Nació en 1973 en Majdanpek, Serbia, y apuntaba muy alto en sus inicios. Con 23 años era la referencia de un Estrella Roja en reconstrucción y que no tenía nada que ver con el que logró la Copa de Europa a comienzos de la década de los noventa. Con Petkovic el club serbio cayó en la primera ronda de una competición europea, la Copa de la UEFA, por primera vez en su historia ante el Xamax suizo. El mediapunta apenas tuvo recorrido en el club de Belgrado y se fue de su país sin alzar ningún título.
Nació en 1973 en Majdanpek, Serbia, y apuntaba muy alto en sus inicios. Con 23 años era la referencia de un Estrella Roja en reconstrucción y que no tenía nada que ver con el que logró la Copa de Europa a comienzos de la década de los noventa. Con Petkovic el club serbio cayó en la primera ronda de una competición europea, la Copa de la UEFA, por primera vez en su historia ante el Xamax suizo. El mediapunta apenas tuvo recorrido en el club de Belgrado y se fue de su país sin alzar ningún título.
Fue el primer fichaje de Lorenzo Sanz como presidente
del Real Madrid, aunque técnicamente era todavía vicepresidente. Se precipitó
tratando de encontrar un diamante en bruto en el otrora pujante fútbol
balcánico. El Real Madrid pagó por él 500 millones de pesetas en septiembre de
1995, aunque no pudo salir hasta diciembre de su país.
La comparativa con Robert Prosinescki era inevitable,
pero el croata había conquistado tres ligas de la antigua Yugoslavia con el
Estrella Roja y la Copa de Europa antes fichar por el Real Madrid. Las lesiones
musculares no le dejaron rendir a su máximo nivel con los blancos, pero sí
realizó después buenas temporadas en España. En Oviedo brilló y le fichó el
Barcelona y el Sevilla. En total jugó 109 encuentros de Primera en España
mientras que Petkovic solamente disputó 22 y en pocos de ellos dio la talla.
Prosineski ganó el Trofeo Ciudad de Santander en 1991, un amistoso veraniego
que perdió el Racing 0 a 3 ante el Real Madrid, poco después de llegar a
España.
Petkovic no tuvo problemas de lesiones en el Real
Madrid. En el Santiago Bernabéu comenzó con el pie torcido ya que el público
pitó a Fernando Hierro por no dejarle tirar una falta… Algo que no sentó bien
en el vestuario. El balcánico era un auténtico especialista a balón parado. A
lo largo de su carrera anotó nueve goles olímpicos y con un golazo de falta dio
un título al Flamengo.
Jugó tres ratos en su primera
etapa en el Real Madrid, 63 minutos en tres partidos, y salió cedido para el
Sevilla en su primera campaña en España, la 95/96. Con el equipo andaluz marcó
un gol en ocho encuentros y tampoco terminó de cuajar.
La temporada siguiente comenzó
la pretemporada con Fabio Capello, que se estrenaba en el Real Madrid. El
italiano dejó claro que no contaba con él y lo hizo de manera pública y
contundente: “Petkovic no tiene calidad
suficiente para jugar en el Madrid y se lo he dicho”. Le dio 18 minutos en dos encuentros de liga y medio tiempo en Copa.
Allí estaba el Racing
dispuesto a echar una mano a Lorenzo Sanz y acogerle en una cesión. Las
relaciones entre el club santanderino y el madrileño eran entonces muy
estrechas y cordiales. El hijo de presidente blanco, Paco Sanz, estaba en el Racing... Con eso queda explicado todo. Ningún otro equipo quería asumir la
mitad de la ficha del serbio, que era una auténtica barbaridad en la época. Se
decía que unos 80 millones de pesetas y ya se había visto en el Sevilla que no
era un futbolista determinante en LaLiga. Fue ocho veces internacional con
Serbia del 95 al 98, pero internacionalmente su estrella se apagó muy pronto.
Jugó 13 partidos, cinco como
titular, como racinguista. Cuatro de Copa y el resto de Liga. Vio tres
amarillas y no marcó. Solamente disputó un encuentro completo, ante el Celta de
Vigo (1-0) en la vuelta de los cuartos de final de la Copa en Balaídos. Los
gallegos ya habían ganado 1-2 en El Sardinero. También actuó en el Bernabéu en
Liga ante su equipo de procedencia. El Racing perdió 2-1 y Petkovic jugó 34
minutos supliendo a Correa, que se lesionó.
Su rendimiento fue muy pobre
y no llegó a congeniar con el entrenador, Marcos Alonso. Se marchó a Serbia
para casarse el mismo día en el que se disputaba un Deportivo-Racing, según la leyenda urbana. El Racing
coqueteó con los puestos medio-altos de la tabla, aunque terminó decimotercero.
Marcos Alonso tenía jugadores foráneos de mucho nivel: Schürrer, Diego López, Correa,
Bestchasnykh… O Zalazar, otro especialista a balón parado con el que repartir
el lanzamiento de faltas.
El club cántabro no ejecutó una opción de compra de 300 millones de
pesetas por el mediapunta que terminó en un destino muy exótico para un futbolista
europeo en los años noventa: Brasil. Fichó por el Vitória para formar dupla con
Bebeto y allí marcó 59 goles. Regresó a Europa en el mercado invernal de 2000 para
jugar en el Venezia de la Serie A que peleaba por la permanencia. Jugó en
Italia 13 encuentros y marcó un gol, pero el equipo descendió.
Regresó a Brasil, el único sitio donde tenía buen cartel, para fichar
por el Flamengo en 2000. Allí le empezaron a llamar O
Pét y rápidamente se convirtió en ídolo local. Un nuevo Zico. Salió del club rojinegro por
problemas de impagos para militar en el Vasco de Gama e incluso tuvo un par de
aventuras en China (ganó el campeonato con el Shanghai Shenhua, aunque luego le retiraron el
título por amaños) y Arabia Saudí. A su regreso a Brasil
jugó para el Flumiense, Goiás, Santos y Atlético Mineiro antes de retornar al
Fla en 2009, ya resueltos los impagos por vía judicial. Su estilo de fútbol se
adaptaba perfectamente al estilo brasileño menos físico y a balón parado seguía
siendo un cañón, así que pudo alargar su vida deportiva hasta los 38.
Es cónsul honorario de
Serbia en Brasil y sus huellas están en el paseo de la fama de Maracaná.
Actualmente tiene 47 años y desde 2017 no entrena. Lo ha hecho muy poco y en
clubes menores. Ejerció como representante de relaciones externas del Fla.
Fue en 2017 cuando en una
etapa convulsa en lo institucional del Vitória, su primer club en Brasil, le
repescaron para poner orden y enganchar a la afición. Iba a ser una especia de
director general, luego pasó a ser director deportivo y acabó en el banquillo
dirigiendo seis partidos sin éxito. Curiosamente cesó a otro exracinguista con
penoso paso por Santander: el central Argel Fucks.
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