El Racing pudo golear en la segunda parte, pero faltó acierto arriba
La película puede ser muy fantástica, pero si se ve píxelada de nada sirve la calidad de la trama. Al Racing le falta definición y lo ve todo borroso cuando se acerca a la portería rival.
Comenzó
a toda máquina el filial rojiblanco, pese a que era su primer amistoso de
pretemporada. A los dos minutos un pase malo de Figueras generó la primera
ocasión con una internada de César García por el costado izquierdo cántabro.
El
Sporting B ahogaba a un adormilado Racing. Cosas de la matinal del sábado.
Antes del minuto tres César García había disparado a puerta vacía desde dentro
del área. Mantilla estuvo atento para despejar sobre la línea de gol. En el
rechace Mateo Arellano disparó desde la frontal y Lucas Díaz tuvo que por estirarse
para despejar el balón a córner.
Se fue calmando el partido, pero la posesión del esférico era del Sporting B y la presión alta del Racing no funcionaba. Comenzó muy flojo el conjunto que entrena Javier Rozada.
La
conexión por la izquierda entre Bustos y Andrade comenzó a funcionar y a los 13
minutos obtuvieron un saque de esquina que quedó en nada. Otra vez Bustos logró
colgar al área un buen balón desde la izquierda y poco a poco el conjunto
santanderino lograba acercarse a los dominios de Javi Izquierdo.
La presión
asturiana atascaba a un Racing impreciso. Los santanderinos tocaban sin demasiado
sentido la pelota y cuando la perdían sufrían con el juego vertical del rival.
En el minuto
22 Pelayo de falta directa desde muy lejos obligó a Lucas Díaz a atrapar en dos
tiempos el balón. El Sporting B estaba más cómodo en Mareo pese a la mejoría racinguista.
Cinco minutos después un robo de Andrade, que ha mejorado en la cuestión física
tras llegar muy tocado pero que es capaz de lo mejor y de lo peor, y la posterior
internada hacía dentro de Bustos acabó con un centro al área del asturiano que no
encontró a nadie. Al menos se rompió la dinámica de dominio total de los
gijoneses.
En un
balón robado por Mantilla, el central lanzó un pase largo diagonal a Bustos. La
jugada quedó en poco y la finalizó Mateo Gandarillas con un disparo entre una
nube de defensores.
En el
minuto 34 el Racing disfrutó de su mejor ocasión. Un pase espléndido de Bustos –jugaba
en casa ya que se formó en Mareo y lo hizo muy bien– dejó solo a Siverio
delante de Izquierdo. El disparo raso y cruzado no era malo, pero el portero
local se lució.
Poco
después un centro lateral de falta lo remató alto Íñigo Sainz-Maza solo dentro del
área. Figueras estaba también libre de marca en el segundo palo. Una buena
acción a balón parado desperdiciada.
Con el
0-0 se llegó al descanso. El Racing había empezado muy mal, pero había
mejorado. Eso sí, a Martín Solar le perdonaron la roja dos veces. Cosas de los
amistosos. Dos faltas absurdas con una amarilla ya en su casillero.
En la
segunda parte cambió radicalmente el panorama y el Racing se hizo con el
control del encuentro. Rozada metió más talento y el Sporting B se fue
diluyendo por el cansancio.
Ya de
inicio Pablo Torre perdonó un gol cantado tras una internada de Camus. Remató
muy alto dentro del área. Antes Jon Ander había hecho un intento de remate
acrobático fallido a lo Campeones.
Las
ocasiones fueron cayeron del lado racinguista. Un remate de Villapalos de
cabeza a balón parado, un disparo lejano
de Sainz-Maza muy desviado o una jugada larga y trenzada que inicio Pablo Torre
para la carrera de Camus y disparo final de Bustos… Izquierdo desvió el esférico a córner.
En el
minuto 61 César logró irse de Mantilla, pero disparó muy mal al final buscando
la escuadra. Fue la réplica asturiana.
Dos minutos
después otro pase de Pablo Torre para Jon Ander permitió al vitoriano driblar
al portero, pero su disparo lo sacó un defensor bajo la línea.
En el minuto
68 Camus terminó otra larga jugada hilvanada por el Racing con un disparo
demasiado cruzado solo ante Izquierdo. Le falta afinar en los metros finales.
La presión del Racing ahogaba al filial. Un robo y centro de Jon Ander no lo
empujó Camus de cabeza a gol.
Pudieron
caer tres goles seguidos ante un Sporting B roto, pero no se anotó ni uno solo.
Ya en el
71 llegó por fin el único gol del duelo. Pablo Torre a placer culminó una
jugada por la derecha tejida por Cejudo, Camus y Mantilla. Este último, de
lateral diestro en la segunda parte, centró raso al aérea.
Con el 0
a 1 se relajó el Racing. En el minuto 77 un chut lejano con mucho peligro de
Queipo se le escapó a Crespo y pudo costar el empate. El colegiado pitó falta
sobre el guardameta de Viveda. El Racing sigue dejando abiertos los partidos...
Algo letal en Segunda B cuando empiece la competición verdadera.
Acabó
sufriendo el equipo cántabro cuando Samu Baños introdujo savia nueva en el
césped y sustituyó a jugadores agotados. No hay que olvidar que era su primer
partido amistoso.
En el 89 Villapalos remató flojo un saque de esquina de Pablo Torre. No tuvo problemas el arquero local para atrapar la pelota. En general, el Racing estuvo bien pero un partido de goleada se terminó en 0-1 y gracias.
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