Los fallos defensivos han ido lastrando al Talavera hasta los puestos de descenso
El CF Talavera de la Reina partía al comienzo de la temporada como un posible candidato a equipo revelación, incluso con el sueño de alcanzar el play-off si todo marchaba de lujo...
La realidad es que está peleando por evitar el descenso haciendo la goma entre el puesto 15 y la zona roja. Actualmente ocupa el puesto 16 tras la última jornada y después de cuatro partidos sin ganar y un solitario empate. Es una entidad modesta, casi recién convertida a SAD, y con la esperanza de ir dando pasos pequeños camino del fútbol profesional.
El Talavera no llega a los 2.500 abonados y la temporada pasada tuvo 1,4 millones de presupuesto, pero tiene detrás un proyecto muy solvente y ambicioso. La institución se refundó en 2011 y en sus diferentes etapas ha estado solamente 19 campañas en Segunda B.
La cara visible y el director general es el exárbitro César Muñiz Fernández, aunque el empresario que sustenta todo es Miguel Martín Acevedo, con participaciones en más de 50 negocios, sobre todo relacionados con la hostelería, pero también retail, telecomunicaciones o distribución. Sus empresas tienen una facturación anual de uno 40 millones de euros. Quizá lo que más le pueda sonar a los aficionados racinguistas es su participación en la cadena de restaurantes italianos Muerde la pasta, que no hace demasiado tiempo abrió en Cantabria en el Centro Comercial Bahía Santander.
De este Talavera destaca sobre todo la idea de continuidad en el proyecto. Se mantiene en el puesto de entrenador Víctor Cea, 37 años, uno de los técnicos más jóvenes de la categoría, y prácticamente todo el bloque que logró la clasificación para la Primera RFEF. El entrenador madrileño pese a su juventud tiene experiencia sobrada en Segunda B con el Unión Adarve, Cultural Leonesa y Melilla. Trabajó también unos meses con la selección Sub-19 de Qatar.
El Talavera ha ganado seis partidos, empatado otros seis y perdido 13 con 22 goles a favor y 36 en contra. En su estadio solamente han vencido en dos choques, con cinco empates y cinco derrotas y anotando menos de un gol por duelo. Números muy pobres y en el último partido en casa el público expresó su malestar con el técnico y el equipo, cayeron 1 a 3 ante el Badajoz.
En el mercado de invierno se reforzaron con dos futbolistas que estaban sin equipo, Ernest Forgàs y Dani Ndi, y dieron la baja a tres jugadores con más de 30 años: Juanma Fernández, Borja Díaz y Ñoño. Los tres estaban llamados a ser jugadores importantes del equipo por nombre.
El Talavera ha intentado hacer una propuesta de fútbol ofensivo y buen trato de balón, mantener la posesión del esférico, sacarlo jugado desde atrás... En su campo, con buenas dimensiones, no ha terminado de salir bien y se esperaba mucho más del equipo.
Pese a esa apuesta ofensiva lo cierto es que solamente el Zamora y el Tudelano han hecho menos goles que ellos. Crean ocasiones, pero no marcan y comenten errores defensivos groseros atrás. “Somos el equipo que más pisa el área contraria de toda la categoría, estamos entre los cinco que más llega al tres cuartos rival, el que más ocasiones genera y, sin embargo, no convertimos todo eso en goles”, explicaba el entrenador madrileño la semana pasada.
En la portería el habitual es el capitán Edu Sousa, 30 años y 1,81. Fue canterano del Deportivo y luego jugó en el Pontevedra toda su carrera hasta llegar al Talavera. Son casi 200 partidos en Segunda B e incluso llegó a disputar fase de ascenso a Segunda con el Pontevedra. Rubén Miño disputó el último partido en casa, ha jugado siete de liga y dos de Copa. Es un veterano, 33 años, y de 1,91. Se formó en La Masía y ha jugado mucho en Segunda, incluso llegó a debutar en Primera con el Mallorca, además de varias experiencias en el extranjero.
En los laterales tiene dos jugadores expertos y con calidad. Por la diestra, Choco, de 34 años, que se incorpora mucho al ataque y por la izquierdo Juan Góngora, otro de los capitanes, de 33 años, que destaca sobre todo por su golpeo a balón parado. Jugó en Segunda A con el UCAM. Ambos estaban ya la campaña pasada al igual que Sousa.
En defensa es donde más esta fallando el equipo y han jugado varios centrales sin aportar soluciones. Javi Domínguez tiene solamente 20 años y mide 1,95, estuvo cedido por el Real Madrid la campaña pasada y que este verano ha firmado ya libre por el Talavera. El mexicano Escalante, que pasó por la Cultural Leonesa; Víctor Ruiz, ex del Córdoba; el argentino Bourdal, 1,92 de altura y 23 años o el veterano Vicente Romero, 33 años, que puede actuar de central o mediocentro y con pasado en la Cultural, UCAM, Rayo Majadahonda, UD Las Palmas y Atlético de Madrid. Todos ellos han ido desfilando por esa posición sin ofrecer garantías.
En el doble pivote el vasco Jon Ceberio ejerce de eje defensivo. Canterano de la Real Sociedad y muy físico, 1,86, además de tener buen toque de balón. El catalán Jordi Ortega es su acompañante en el eje. Tiene 27 años y se formó en La Masía, probó luego en el fútbol inglés y ha jugado en el Córdoba y Melilla. Llegó este verano procedente del Calahorra.
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El gallego David Añón |
Y el principal peligro del Talavera llega por las bandas, aunque Cea está dejando una de ellas tapada con un mediocentro, las bandas asimétricas. Ese papel le toca a Toño Calvo, habitual mediocentro ofensivo de 24 años. Lo normal sería que la banda derecha la ocupase el extremo diestro David Añón, que estaba llamado a ser un jugador clave, pero lleva dos goles en 23 partidos, contando uno de Copa. Es su segunda campaña en el Talavera. Llegó procedente del Coruxo tras pasar por la liga polaca. La otra banda es para el brasileño Rodrigo Farofa, cedido por el Real Madrid. Tiene 21 años y ha sido lo mejor del equipo en las últimas jornadas. Lleva cuatro goles.
El pequeño y habilidoso Dani Pichín, 1,62 y 29 años está actualmente como segundo delantero bajando a recibir y dejándose caer a las bandas. Es diestro, aunque tiende más a caer a la izquierda. Llegó este verano procedente del Sanse. Son 53 goles en 261 encuentros en Segunda B. Es un jugador que saber sacar muchas faltas y que da mucha guerra a las defensas.
Como delantero centro el habitual ahora es Cristian Perales fichado del Yeclano. Tiene 32 años y mucho recorrido en Segunda B con muchos equipos. Ya estuvo en el Talavera en la 15/16 y marcó 18 goles en 35 encuentros en esta división. Con el Sanse también anotó en Segunda B 15 goles en una temporada. Lleva cuatro goles en 22 partidos. La otra opción es el fichaje de invierno Ernest Forgàs, ex del Badajoz o Andorra. Un delantero de 1,88.
Uzo Adighibe, un delantero nigeriano de 25 años, muy fuerte físicamente y con velocidad, que fue canterano del Atlético de Madrid y ha pasado por diferentes equipos de Madrid y La Mancha, está saliendo de una lesión, aunque ya disponible. Lleva dos goles y una asistencia en 12 partidos. También está trabajando con el grupo el juvenil Ismael.
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